Nuestras madres son nuestros mayores fans. No importa cuántas veces nos caemos, siempre están allí para recogernos. Son nuestras mejores amigas, nuestros protectoras y nuestros curanderas. Y lo mismo pasa con nuestros amigos peludos…
Estas perritas son dulces mamás que simplemente no puede dejar de mostrar a sus pequeños. Tal vez el orgullo en sus ojos te hará llamar a tu mamá. Ella te echa de menos, ya lo sabes.